Admito que fui muy grosera al escribirte el 24 de diciembre pidiéndote el 50% del dinero que tuve que pagar en el hotel.
Admito que te escribí llenita de furia y dolor. Admito que te escribí con un impulso que demuestra que aunque no lo crea aun te quiero. Y aún me duele todo esto qué pasó.
El viaje fue tal vez la mejor idea que mi hermano ha tenido en la vida. Irme a desprenderme de todo por unos días fue maravilloso, permitirme llorar, amar, ser amada, ser vista, ver, verme y sentir fue algo maravilloso. Pero ahora, hoy estoy en el regreso. Y tengo varios asuntos pendientes… y apareces tú de nuevo.
Hoy se que no quiero nada contigo, que eres un grato recuerdo, pero que definitivamente no era feliz contigo y nunca lo iba a ser. Hoy encuentro con exactitud los momentos en los cuales tuve que terminarte: en el momento en el cual me gritaste en nuestro primer viaje. Cuando tuviste los pantalones de gritarme frente a todo el mundo en el terminal de transporte. El segundo momento fue cuando me dijiste: “afortunadamente y quiera Dios nunca llegue a maltratarte o darte golpes” mirando al cielo. Nunca insinúaste mas que esa frase que nunca la pude olvidar. El tercero cuando me gritaste en Cancún, mientras que yo lloraba de manera infantil e indefensa y me dijiste “y cómo no te quieres callar me voy a otra habitación!”. Te diste cuenta que me dejaste sola esa noche? Y saber que esos mismos días ya estabas negando mi existencia a tus mujeres.
Soporte todo eso, en silencio y la verdad muy confundida pero la cuarta vez fue este 24 de diciembre. Cuando me exigías que retractara mis palabras a cambio de tu pago del 50% del hotel. Y es aquí cuando me doy cuenta que ya he crecido: me di cuenta de manera inmediata tu sutil pero directa forma de ejercer poder en mi. Entre líneas, me dijiste algo así como “si quieres mi plata, dame la razón… que yo aprovecharé esta puerta para de nuevo hacerte un juego mental”.
Realmente nunca pensé que fueras tan astuto e inteligente. Te haz comportado como una piraña, de esas que buscan entrada donde no la hay. Siento que he tapado todos los intentos de gol, el mejor fue cuando me llamaste a las 6 o 7 am en mi viaje. Y dormida te digo “estoy dormida, pero F. no me llames más a mi”. Acto seguido, está mujercita llorando a moco herido por todo el hostal, pero creo que eso hace parte de pegar sus pedacitos de alma.
Hoy recibo otro correo tuyo, y con el acostumbrado cinismo me dices:
hay dias de dias. quiero que sepas q hoy te extraño y que siento q te quiero como el dia #1. mi vida, ahora casi perfecta le hace falta tu energia y el amor q sentia contigo. perdoname por todo lo malo, incluso por lo q te escribi el 24, asi me hayas hecho alterar con tus palabras.
Y obviamente me moría de ganas de darte respuesta. Pero mi amiga la valiente me dijo: “mira lo mejor que puedes hacer es darle tu indiferencia, el a ti no te debe importar” y a modo de darme un consuelo mental aquí te escribo mi respuesta. En este momento mucho más calmada que cuando leí este correo por primera vez.
Ja ja ja. Cuál primer día, el que me conociste? O el primer día que me fuiste infiel? O el primer día que me negaste? Realmente no se de cual primer día me hablas.
Amor ? Alegría ? Si estuviéramos juntos tú estarías en la patria de Bolívar con tus perras, putas y travestís mientras que yo aquí jugando a “no pasa nada, yo me quedo acá en Bogotá mientras tú trabajas en Venezuela”. Yo viajando con mis papás como lo estoy ahora, pero pensando en ti, fingiendo que si te importo. Por que al final ni siquiera te esforzabas en hacerme sentir que me quería y valorabas…pues al final mientras yo estaba en la cama con la segunda dosis tú hacías un trío con una pareja.
En este momento, no tengo nada agradable para decirte. Me gustaría tanto que sintieras un poquito de mi dolor. Solamente quiero decirte cosas provocadoras, quiero que te sientas miserable, tengo mucha rabia adentro. Quiero darte la cachetada que te mereces, gritarte que eres un maricon que me engaño, quiero darte puños y partirte un vaso en la cabeza, aveces siento que si te veo podría llegar a matarte.
Es mejor que por ahora no te desbloquee, no puedo decir que nunca lo haré. Pero en este momento me causa mucha inestabilidad esta situación.
Ya hoy se que soy muy linda, muy sexy, muy sensual y que puedo llevarme a la cama a todo hombre que yo desee. Ya se que debo cumplirme y durar al menos dos años sola, conociéndome, amándome y cantándome. Sin embargo está cortada tan fuerte me duele, y me dolerá. Siento que tengo el corazón muy inestable aún…
8:53 pm. Diciembre 28 de 2021, en la única hostelería en la carretera hacia santo domingo en Ecuador.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario